Aquí traemos un caso especial. El dueño de la marca de ropa Bikkembergs compró en 2006 un equipo amateur semiprofesional italiano, el FC Fossombrone. La vinculación de la entidad con el deporte era tanta, que este diseñador belga adquirió el club por 250.000 euros, toda una ganga comparada con el dinero que está ganando con la publicidad y el éxito de la marca. Como amante del fútbol, el Fossombrone representa la esencia del deporte puro con todos sus valores y a la vez permite ser un escaparate de sus nuevos diseños deportivos. Hasta el momento la marca Bikkembergs es una referencia en tendencia de moda deportiva, consiguiendo combinar ropa de calle elegante con detalles deportivos, tanto en prendas de vestir, como de ropa interior, como de zapatillas.
Pero vamos a lo que nos interesa. Los calzoncillos Bikkembergs están causando estragos y los anuncios de publicidad están derritiendo hasta a los más duros. Nada menos, esta semana pasada era la contraportada de El País Semanal. La foto no la tenemos disponible aún pero la pondremos cuanto antes. Toda una plantilla de futbolistas posando en slips, desnudos, sudados, con esos torsos moldeados a base de entrenamientos, gimnasios, partidos… Todo un espectáculo digno de admiración. Ni las esculturas griegas están mejor proporcionadas. Ya son muchas las proposiciones que han recibido estos jugadorazos por otras empresas de moda.
En el vídeo se puede observar la perfección masculina en esos torsos, piernas y brazos. El realizador nos ha hecho un guiño con los planos cortos de los calzoncillos. Y la representación se trata de unos cien futbolistas que se exhibieron ante los curiosos la nueva línea de calzoncillos para este verano. Para ello, batieron un récord: cambiarse los slips delante de toda la gente en sólo diez segundos. Lástima que eso no se vea en el vídeo. Aunque más les vale no ser tan rápidos en todas las cosas…
Después de ver todo esto no puedo dejar de pensar lo bien que me lo pasaría en las duchas con ellos. ¡Qué escándalo! De momento me tengo que conformar con verles desde Internet, pero lo que sí ya he hecho es comprarme un lote de Bikkembergs.
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